La delgada linea

Entre una relación D/s y el amor, existe una fina línea, ¿qué pasa cuando se atraviesa?, que se confunden muchas cosas, que la amistad se convierte en imposible, que tu vida sin la de la otra persona se convierte en algo sin sentido, que ya se puede convertir en una relación 24/7 en la que la D/s ocupe todas las facetas de tu vida, pero, ¿es eso bueno?
Algunos pensaran que eso es la situación ideal, que esa situación es la que se busca al final, que tu propia pareja sea tu Ama o tu sumiso, tenerlo todo en casa y sin necesidad de ocultar o tener que ser más discretos, el poder planear muchas situaciones.
Otros sin embargo, por multitud de circunstancias, pensaran que no es así, que en sus vidas quieren tener una relación vainilla y luego satisfacer sus sentimientos D/s con otras parejas, bien porque ya tienen pareja cuando descubren la D/s ó bien porque no la conciben de otra forma y están en contra del 24/7.
Yo descubrí el D/s hace 3 años, con pareja, así que soy de los que buscaban una relación en la que distinguir mi vida vainilla y mi vida de sumiso, algo que pensaba que era sencillo, solo debía ser sumiso unas horas de mi vida, y ejercer como tal con algunas personas que iba conociendo poco a poco, pero la realidad es bien distinta, es muy sencillo cruzar la finísima línea que distingue el amor de la D/s, aparte de que una vez cruzada es difícil separar que es que, y entre otras cosas porque como he dicho bastantes veces, el sumiso ni es ni se hace, se siente.
Así que si, que se es sumiso las 24 horas, pero no por ello “ejerces” como tal, sino que eres sumiso de la persona a la que tu voluntariamente te entregas, porque se ha ganado tu confianza y tu alma, y si cruzas la línea, también se gana tu corazón, y ahí es cuando viene el problema, porque ¿qué hacer con tu pareja? ¿realmente dejas de quererla?
Mi “Pepito grillo”, a mi me dice que no, que no dejo de quererla, pero también me dice que así no me puedo entregar al 100% en una relación, porque aunque quisiera hacerlo, mi cabeza también pensaría en otras personas y cosas, y además, cada acto tiene sus consecuencias, y en eso también hay que pensar.
Seguramente haya muchas personas que sepan distinguir sus dos personalidades, y dejar su mente en blanco en cada oportunidad para separar ambos terrenos en su vida, yo me alegro por ellos, porque a mi también me gustaría poder hacerlo, pero no es así, soy incapaz, para mi, mi vida es un todo, un mundo por donde yo me muevo, y en que cualquier acto o decisión que tome, tiene una consecuencia para mi y para los que me rodean, así que he de pensar en muchos cada vez que decido.