domingo, 21 de junio de 2009

Nuevo Despacho, ¿Nueva Vida?


Bueno, así empecé a caminar en este negocio de la mano de dos personas que llevaban un tiempo ya asesorando, un despacho de catalogado como mediano tirando a grande y en el que trabajábamos 9 personas, en un principio yo me tenía que hacer cargo de de una parte de la consultoría, la contabilidad, y así empecé, me hice cago de la parte contable y poco a poco fui cogiendo confianza.
Estar en un despacho así, la verdad es que me dio confianza en mi mismo, ya que los dueños, tenían experiencia y una cartera de clientes importante, lo cual me animaba a seguir adelante, ya que creí en el proyecto.
Aquí voy a hacer un pequeño alto en el camino, quiero que sepáis, si no os habéis dado cuenta todavía, que cuando creo en un proyecto, me entrego al máximo para conseguirlo, y lucho hasta al final por el, cueste lo que cueste y en este proyecto creí desde el principio.
Bueno, pues los primeros años en ese despacho, fueron bastante bien, había buen rollito entre los compañeros, he de decir que al principio entre como un colaborador, no estaba contratado por la empresa, era un trabajador autónomo, pero me llevaba bien con los jefes y de echo me trataban mas o menos como a ellos, y ellos mismos contaban conmigo para algunas cosas.
Al cabo de dos años, ya me hicieron contrato fijo y pasé a ser empleado de la empresa, mi trabajo poco a poco fue aumentando en cantidad y en calidad, si, poco a poco iban dándome alguna responsabilidad más, empecé a encargarme de los impuestos también, aunque ya hacía algunos, porque las empresas que yo aporte así lo requerían, y poco a poco la fusión fue haciéndose total, no habiendo clientes que yo aportara ni clientes que del despacho, ahora eran todos del despacho.
Hasta aquí todo iba perfecto y de echo mientras yo absorbía parte del trabajo de uno de los socios, el hacia de relaciones publicas e iba incorporando mas clientes al despacho, por lo que el despacho iba creciendo en clientes y trabajo, pero claro, no en personal, lo que significaba que como siempre había que hacer más horas, ¿Quién las hacía?, pues si habéis acertado, el que era responsable del departamento fiscal y contable recientemente creado y del cual me nombraron jefe.
Así que pase de ser mi propio jefe a estar de jefe de departamento en otra empresa, pero por mi forma de ser, por lo que alguno me habéis dicho de mi adicción al trabajo, o no se porque, siempre me toca ampliar mi horario de trabajo.
Lo cierto es que creí que se me habría una nueva vida y así fue, lo que trato de averiguar es si todo esto ha sido para mejor o para peor.

1 comentario:

  1. sabes k creo k no sabes decir k no a algunos nos es muy dificil hacerlo pensamos k nos va a hacer daño y de vez en cuando deberiamos decirlo
    Maria

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