De Dimes y Diretes.

Bueno, en estos días ha pasado un poco el estrés, los pensamientos vuelven a mi mente, y quizá sea un poco duro lo que voy a decir, pero creo que es lo que siento en este momento, bien por que el bajón de actividad me ha dejado K.O., bien porque creo que es momento de decirlo.

Desde el principio de adentrarme en este mundo del BDSM, me encontré con que es difícil que te acepten de entrada, luego conforme te vas dando a conocer, hay quien te admite y quien no te admite dentro de su grupito, hasta ahí como cualquier tipo de relación, pero poco a poco te vas das dando cuenta de que la mayoría de los que te admiten es por su interés, por decir que tiene el grupo más grande, por decir que tiene la sala con más nicks que otras, por aparentar, por ser los mejores, por ser los más deseados, pero poco a poco te vas dando cuenta, que realmente el 80% de las personas que se mueven en la salas de chat, lo hacen por su propio interés, y no discrimino ni sumisos ni Dominantes.

Al final todo esto se convierte en un “dimes y diretes”, que no llevan a ninguna parte, solo ha darte cuenta, de que por desgracia es un mundo donde la traición y el olvido está al orden del día, ante todo porque nos olvidamos de que somos personas antes de tener un rol, que como personas tenemos unos sentimientos, unos afectos y otras necesidades que hacen que busquemos con gente afín, con gente que comparta nuestras aficiones, pero va y resulta que en este mundo, la gran mayoría de relaciones son a través de Internet y entonces te das cuenta de que ahí no solo hay personas afines a tu manera de vivir la sexualidad, sino que hay autentic@s lobos con piel de cordero acechando su presa, y cuando la encuentran, difícilmente la sueltan, y si se les escapa, ya se encargan de empezar las murmuraciones para dejarla en mal lugar, para malmeter.

Hay veces que ves nicks que son uña y carne y al día siguiente se están criticando, sacando las navajas y apuñalándose por la espalda, intentando seguir en la brecha y ser el mejor, el más, es que tiene la razón, eso si, parece que siempre tiene la razón el que más descalifica al otro, y luego te das cuenta de lo que realmente mueve todo esto, LA ENVIDIA.

Mi experiencia personal sobre esto, es que en mi corto tiempo bedesemero, me he encontrado lo que he explicado anteriormente, pero también he encontrado personas que merecen la pena conocer, cultivar su amistad y seguir adelante con ella, aunque después de la ruptura, también me he encontrado con personas afines a la otra persona, que se han despreocupado por seguir la amistad, así, que bueno, uno es paciente e intenta que ese lazo no se rompa, pero como dice el dicho, si uno no quiere, dos no son.

También he tenido que oír descalificaciones, supuestos engaños, que digo yo, ¿y porque no me lo dijeron cuando estábamos juntos?, pero cada vez tengo más clara mi respuesta, la envidia hace que la mentira sea el arma para si es posible, hundirte más en la miseria.